Todo lo que debes saber sobre el contrato de formación en alternancia
El mundo laboral cambia y la forma en la que las empresas incorporan y forman talento, también. En los últimos años, una figura ha cobrado un protagonismo silencioso pero imparable: el contrato de formación en alternancia.
No es una moda ni una fórmula pasajera. Es la herramienta que une dos fuerzas que antes parecían opuestas: trabajo y aprendizaje.
Qué implica el contrato de formación en alternancia
El atractivo de este contrato no está solo en su denominación. La verdadera magia ocurre cuando una persona puede aprender un oficio mientras lo practica y una empresa forma a su equipo a medida, sin perder productividad ni asumir grandes costes.
En la práctica, el contrato de formación en alternancia permite que el trabajador reciba formación oficial vinculada a su puesto —impartida por un centro acreditado— mientras desempeña su labor en la empresa. La jornada se divide entre tiempo de formación y tiempo de trabajo efectivo, creando una sinergia que pocas modalidades contractuales ofrecen.
Beneficios para las empresas del contrato de formación en alternancia
Las empresas, además de incorporar talento nuevo, lo hacen con importantes incentivos. Este tipo de contrato conlleva bonificaciones en los seguros sociales y subvenciones en la formación, además de facilitar la retención del trabajador formado según las necesidades del puesto.
En un contexto donde el coste de contratar preocupa a todas las pymes, el contrato de formación en alternancia se convierte en una estrategia de crecimiento sostenible.
Formación adaptada y oficial
No toda formación es la que vale. Solo los centros acreditados pueden impartir la formación asociada al contrato de formación en alternancia. Esto garantiza que el aprendizaje esté alineado con los certificados de profesionalidad o títulos de FP, asegurando la calidad del proceso.
Como empresa de formación para empresas y para el empleo, nos encargamos de acompañar a las organizaciones en todo el proceso, desde la gestión documental hasta la tutorización del alumno y la adaptación del plan formativo a la realidad del puesto.
El futuro de la formación profesional y el empleo
La empleabilidad ya no se mide solo por títulos, sino por competencias en empresas reales. Y el contrato de formación en alternancia está alineado con esta nueva lógica: aprender haciendo, certificar aprendiendo.
Por eso, cada vez más empresas optan por esta modalidad para profesionalizar sus equipos, garantizar la cualificación de su plantilla y cumplir con las exigencias de un mercado en constante evolución.
El contrato de formación en alternancia, al final, se convierte en una estrategia de crecimiento compartido entre empresa, trabajador y centro de formación.
Una fórmula en la que todos ganan: la empresa reduce costes, el trabajador accede a empleo y formación, y el mercado laboral gana profesionales más cualificados y motivados.
En Cei Formación ayudamos a transformar esa oportunidad en resultados reales. Porque saber gestionar el talento es invertir en el futuro.